CADENA-G80

Conoce los tres diferentes grados de cadena

Las cadenas son una de las formas más versátiles y confiables de elevar, tensar y atar materiales en una variedad de aplicaciones. Por eso, una pregunta común es la siguiente: ¿Cuál son las diferencias entre las cadenas de grado 70, grado 80 y grado 100?

Pues hoy en Bezabala resolvemos todas tus dudas: 

  1. Grado 70

Esta es una cadena de acero al carbono “tratada al calor” que no contiene aleaciones añadidas al acero. Esta cadena se estirará antes de romperse, y no tiene las propiedades necesarias para izaje. 

En consecuencia, la cadena grado 70 no está diseñada para el levantamiento de carga. En su lugar, ha sido diseñada como una cadena para amarrar o atar para transporte. Asimismo, esta cadena suele tener un acabado en cromato de oro para ayudar a resistir la corrosión por la exposición continua a los elementos y el rigor del uso en carreteras.

  1. Grado 80

Esta es una cadena de acero tratada al calor con una alta resistencia de relación entre el peso y el ratio. Su resistencia la vuelve una opción segura para maniobras en elevación y eslingas de izaje. Además, es excelente para uso como cadena de recuperación, seguridad y remolque. 

De igual manera, la cadena grado 80 se está volviendo común en la industria de transporte en plataforma de camiones para asegurar la carga de maquinaria pesada.

  1. Grado 100

La cadena grado 100 es un producto relativamente nuevo y se está volviendo cada vez más popular como reemplazo de la cadena grado 80. Considerada como calidad premium por los fabricantes, proporciona alrededor de 25 % más límite de carga que la cadena grado 80, además de estar aprobada para maniobras en elevación. 

Debido a la resistencia añadida de este grado sobre el grado 80, se está empleando mucho más en cargas para plataformas de camiones, ya que se puede utilizar cadenas más cortas sin sacrificar la capacidad de límite de carga.

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¿Qué es la ductilidad?

La ductilidad es una de las propiedades mecánicas de la materia, común en las aleaciones metálicas o materiales asfálticos, que consiste en la capacidad de deformarse plásticamente sin romperse, cuando se hallan bajo acción de una fuerza sostenida de alargamiento, formando así hilos o alambres del mismo material. Es decir, cuando se estiran desde dos extremos opuestos, forman hilos del material en vez de romperse.

A los materiales que presentan esta propiedad se les conoce como dúctiles, y comúnmente se califican como contrarios de los frágiles, pues a diferencia de estos últimos su rotura ocurre sólo después de soportar grandes deformaciones. La etapa en que el material dúctil se estira y alarga antes de romperse se denomina fase de fluencia; una vez superado este punto, las deformaciones son irreversibles y permanentes.

Los materiales dúctiles son muy empleados en la industria de los materiales, ya que de ellos pueden obtenerse hilos, alambres y otras presentaciones. Además, se trata de materiales resilientes, elásticos, cuyas partículas poseen facilidad para deslizarse unas por encima de otras.

Algunos ejemplos de materiales dúctiles son:

  • El bronce
  • El latón
  • El acero
  • El oro
  • El hierro
  • La plata
  • El cobre
  • El platino
  • El plomo
  • El aluminio

Ductilidad y maleabilidad

Así como existe la ductilidad en la mayoría de los metales, también es común en este tipo de materiales la maleabilidad. Esta otra propiedad mecánica consiste en la capacidad para ser laminados sin romperse, es decir, para ser moldeados en láminas delgadas, a través de procedimientos de compresión.

Semejante procedimiento es de suma importancia en la industria siderúrgica, dado que en láminas es mucho más fácil transportar y almacenar determinados materiales.

Los materiales maleables, a diferencia de los dúctiles, no forman hilos al estirarse, aunque un mismo material puede ser dúctil y maleable a la vez. Son casos de materiales maleables: el oro, el aluminio, la plata, el cobre, el platino y el hierro.

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Tipos de perfiles de acero

El acero es uno de los materiales que más se tiende utilizar en el área de la construcción debido a los beneficios estructurales y funcionales, eso sin mencionar su adaptabilidad y usos

De esta forma, tal y como os adelantamos la semana pasada, podemos encontrar muchos tipos de perfiles de acero. ¿Quieres conocerlos todos? Pues hoy en Bezabala te lo contamos todo.

Tipos de perfiles de acero

Perfil H: es el tipo de perfil laminado caliente que es concebido en forma de H, presenta una forma regular y prismática. Se centra en la creación de pilares, cimbras metálicas y vigas. Mientras que su uso está enfocado en la edificación de estructuras grandes como edificios, puentes, almacenes, e inclusive barcos de gran tamaño.

Canales U: Acero realizado en caliente mediante láminas que efectúan que el producto final tenga la forma de una U. Sus usos engloban la fabricación de estructuras metálicas: canales, vigas, carrocería, viguetas, etc.

Ángulos estructurales en L: tipo de perfil de acero que se hace de manera equidistante en la sección transversal para que se mantenga cierta armonía; se forma un ángulo recto y es utilizado para para techos industriales, almacenes, grandes luces, puertas, etc.

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¿Qué son los perfiles de acero?

El acero es uno de los materiales que más se tiende utilizar en el área de la construcción debido a los beneficios estructurales y funcionales, eso sin mencionar su adaptabilidad y usos

Este material se puede encontrar en varios aspectos de una construcción, no solo en la estructura exterior. Así una de estas partes son los perfiles de acero.

¿Quieres saber más? Pues hoy en Bezabala te lo contamos todo.

¿Qué son los perfiles de acero?

Los perfiles de acero son un tipo de producto que se crea mediante la laminación en caliente del acero. El laminado es un proceso industrial mediante el cual el grosor de un metal es reducido mediante el uso de distintos procesos.

Los dos tipos de laminación se dividen en: proceso caliente y proceso frío. El primero hace referencia al que es utilizado mediante con altas temperaturas y la presión de dos rodillos, facilitando la manipulación de los metales para que se cumplan ciertas especificaciones. Por otro lado, el segundo es un proceso en el cual el acero es enfriado mientras se realiza un laminado en caliente.

Este tipo de presentación del acero, sin importar que tipo de perfil sea (frío o caliente), suelen ser utilizado para la construcción de obras y estructuras que presenten formas, dimensiones y configuraciones inexactas o distintas entre sí mismas.

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Cadenas de carga: ¿hay una superior? (II)

Tal y como os adelantamos la semana pasada, muchas de las herramientas para la industria más utilizadas en la edificación y manufactura de cargamentos son las cuerdas, cadenas y eslingas.

Las cadenas se emplean frecuentemente para la elevación con fines industriales, y su izaje y almacenaje son prácticos, pese a que la utilización de cables de acero es al igual cada día más habitual en esta índole de espacios de trabajos y manufacturas.

Hoy os seguimos hablando de los tipos de cadenas de carga que existen:

Cadenas

Las cadenas se utilizan con frecuencia para la elevación con fines industriales. Son muy efectivas para aguantar modalidades de trabajo pesado y fijar cargas pesadas. Además, pueden proporcionar una tolerancia distinta a otros instrumentos.

Por mencionar una instancia, las cadenas 80 de acero pueden elevarse hasta aproximadamente 20 toneladas antes de ceder. De forma contraria, el punto de ruptura para las cadenas de hierro forjado es de aproximadamente de 6.75 toneladas.

Existen otras cadenas de grado en el mercado actual. Según los tipos de carga a manipular, es de valor investigar a detalle sus características de tolerancia.

Eslingas

Una eslinga es una herramienta utilizada para levantar objetos pesados. Su función es conectar la o las cargas con el equipo que realiza el izaje.

Las eslingas que recurren al cable de acero se utilizan frecuentemente en una variedad de industrias y se usan más conforme las cargas aumentan su volumen.

Las cadenas también se pueden emplear en las obras de construcción tal y como las eslingas, pero, estas últimas están diseñadas específicamente para tolerar mucha más tensión en el desplazamiento de cargas.

Así que ahora que conoces más sobre las características básicas de estos equipos, analiza cuál podría ser la más acertada para tus servicios de desplazamiento de cargas. Valora impedimentos, resistencia ante el entorno y calidad de vida útil dependiendo de tus costos de construcción.

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Cadenas de carga: ¿hay una superior? (I)

Muchas de las herramientas para la industria más utilizadas en la edificación y manufactura de cargamentos son las cuerdas, cadenas y eslingas.

Las cadenas se emplean frecuentemente para la elevación con fines industriales, y su izaje y almacenaje son prácticos, pese a que la utilización de cables de acero es al igual cada día más habitual en esta índole de espacios de trabajos y manufacturas.

Una eslinga es un artefacto hecho para para izar cargamentos de volumen industrial, que entronca la carga de material que se pretende mover al aparato que el desplazamiento. De esta forma, las eslingas que requieren cable metálico se usan comúnmente en una multiplicidad de sectores industriales y se utilizan más a la par que las cargas se vuelven más difíciles.

Algunos de los dispositivos más populares para actividades de amarre de cargas y su movimiento son las cuerdas, cadenas y eslingas.

¿Quieres saber más? Pues toma nota porque hoy en Bezabala te lo contamos todo:

1. Cuerdas

Las cuerdas se utilizan de varias formas en la esfera industrial. Por ejemplo, es posible emplearlas para levantar y bajar cargas de amplio volumen, así como para trasladar a los trabajadores a grandes alturas para trabajar en obras tales como levantamientos estructurales y reparaciones en rascacielos.

La cuerda puede estar fabricada de distintos tipos de materiales, como alambre, fibra artificial y fibra natural.

Las cuerdas manufacturadas en fibra son especialmente responsivas para el trabajo industrial debido a que requieren el menor cuidado. Son muy resistentes al medio ambiente y toleran cientos de condiciones climáticas. De igual forma son muy resistentes a la oxidación.

De forma contraria, los cables de acero, usualmente funcionales, tienen diversas limitantes. El cable metálico, por mencionar una instancia, no puede almacenarse entretanto está mojado, y es necesario limpiarlo de manera frecuente. Asímismo es imperativo lubricar los cables. Los cables de fibra natural son vulnerables a la oxidación y al herrumbre, por lo cual es fundamental efectuar una evaluación rutinaria, de forma ideal semestralmente aproximadamente.

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Usos y tipos de cables de acero (II)

Tal y como te contamos la semana pasada, existen distintos tipos de cables de acero. Pero, ¿sabes cuál es el uso de cada tipo? Pues hoy en Bezabala te lo contamos todo:

Cables de acero cincado

Los cables de acero cincado son cables normales de acero recubiertos con una delgada capa de cinc, que garantiza una buena resistencia a la corrosión y a la oxidación. 

Sin embargo, al estar realizados completamente de acero y no en aleaciones mixtas de otros metales, estos productos garantizan, con respecto a los cables de acero inoxidable, una mayor resistencia mecánica, debido precisamente a la pureza del material utilizado.

Los cables de acero cincado se pueden utilizar en los sistemas de elevación, como cuerdas para transmisiones flexibles en engranajes de diferente tipo o como cables para redes de protección contra caída de rocas. Su revestimiento de cinc los hace más resistentes a las abrasiones, la oxidación y el desgaste, y, por lo tanto, duran mucho más que los cables de acero no galvanizado.

Estructura y dimensiones

Normalmente, los cables de acero están formados por un alma central y por una corona de hebras enrolladas en hélice alrededor de aquella. 

Las hebras son grupos de hilos individuales de acero, también enrollados en hélice alrededor de un hilo central. Por su parte, el alma central puede ser de material textil o estar formada a su vez por una hebra. 

La estructura del cable influye directamente en sus propiedades fundamentales, como la resistencia a la tracción y a la rotura, la flexibilidad y la capacidad de torsión.

Por lo que concierne a las dimensiones, los cables de acero más utilizados van desde los más delgados de 1 mm de diámetro hasta los más gruesos de 40 mm o más, indicados para aplicaciones muy duras, como la elevación de cargas pesadas.

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Usos y tipos de cables de acero (I)

¿Sabías que existen varios tipos de claves de acero? Pero, ¿sabes cuál es el uso de cada tipo? Pues hoy en Bezabala te lo contamos todo:

Los cables de acero son una familia de productos profesionales destinados a múltiples usos en sectores diferentes: elevación de cargas de diferente peso en el sector de la construcción, equipamientos de seguridad en las líneas de vida, refuerzo estructural en las redes de protección contra caída de rocas, ascensores y equipos de elevación en general, o bien como transmisiones flexibles e, incluso, como elementos en el sector arquitectónico.

Los cables de acero más utilizados para estas aplicaciones se dividen en tres tipos principales. Por ello, junto a los simples cables de acero sin revestimiento, el mercado también propone cables de acero inoxidable y cables de acero cincado, destinados a usos especiales. 

¡Toma nota porque ahora te contaremos las características de cada tipo!

Cables de acero inoxidable

Los cables de acero inoxidable se fabrican con una aleación metálica especial que comprende acero y otros materiales, como cromo, molibdeno, níquel y carbono, según las propiedades que se desean obtener en el producto final.

La propiedad que tienen en común los cables de acero inoxidable es la alta resistencia a la oxidación y a la corrosión, una característica que los hace especialmente indicados para usarse en ambientes húmedos. 

Los cables de acero inoxidable se utilizan en el sector náutico, en el sector de la construcción para las líneas de vida, como cuerdas de transmisión, que también es posible utilizar en ambientes húmedos, y como elementos para barandillas, escaleras y antepechos expuestos a agentes atmosféricos.

Los cables de acero inoxidable más utilizados en estas aplicaciones se realizan con AISI-316, una aleación caracterizada por la excelente resistencia a la corrosión intercristalina y la resistencia a aplicaciones a altas temperaturas, superior con respecto a otras aleaciones de acero inoxidable.

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Balancines monoviga: ¿qué son y para qué se usan?

Existen infinidad de utillajes de elevación como son los magnéticos, los de vacío, etc. Pero en esta sección nos centraremos principalmente en los utillajes que por su estructura y forma son capaces de elevar cargas con seguridad y total ergonomía.

Los utillajes de elevación pueden ser simples como una viga también llamados balancines, estos balancines constan de una viga como cuerpo principal en el que se han añadido diferentes elementos secundarios que sirven para la conexión entre la grúa y el balancín y el balancín y la carga.

Los balancines monoviga son ideales para el izado de cargas lineales. Estas cargas se caracterizan porque son mucho más largas que anchas y altas, por lo que mantienen el equilibrio cuando son cogidas a lo largo. 

De esta forma, los balancines monoviga que disponemos en Bezabala se adaptan perfectamente a la carga a elevar, asegurando una total comodidad, velocidad y seguridad en cada operación. 

Los balancines monoviga son muy fáciles de guardar y ocupan poco espacio en la nave debido a su pequeño perfil. El sistema de enganche de los balancines monoviga se puede adaptar  a las características de la carga y las instalaciones, pudiéndose diseñar para uno o varios ganchos, un sistema de cadenas o un conjunto de eslingas. Todo sistema de cogida se puede montar fijo o regulable dependiendo de las necesidades del cliente.

¡No dudes en ponerte en contacto con nosotros en el 944 483 800 o en bilbao@bezabala.es!

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¿Cuándo y quién descubrió los imanes?

El descubrimiento y, por tanto, la historia de los imanes ha dado forma al mundo. Incluso hoy en día, los imanes se utilizan en áreas y aplicaciones muy diferentes. Estos se utilizan en motores eléctricos, televisores, altavoces, transformadores, monitores, micrófonos y muchos otros dispositivos. Los imanes permanentes ahora se usan incluso en joyas y juguetes.

¿Quieres saber más? Hoy desde Bezala, cables y elevación te lo contamos todo.

Muchos registros escritos indican que Thales de Millet descubrió los primeros imanes permanentes. Thales de Millet vivió en Grecia unos 600 años antes de Cristo. Fue un explorador de la electricidad y del magnetismo. Su investigación estaba basada en las atracciones entre la resina de ámbar y los imanes.

El campo de aplicación de los primeros imanes

La primera piedra magnética encontrada no es de hecho una piedra real, sino que es un óxido de hierro magnetizado. Ésta fue encontrada en China en el siglo III a.C.

La historia de los imanes continuó en el siglo I a.C. con la invención de la aguja flotante. Se encontró que un pasador de hierro se magnetizaba cuando se acercaba a una piedra magnética. Al colocar la aguja magnetizada en el corcho y luego sobre una superficie de agua, la aguja siempre se movía en dos direcciones definidas. Un lado de la aguja siempre apunta hacia el norte, mientras que el otro siempre apunta hacia el sur.

Poco tiempo después, en 1269, Peter Peregrinus publicó su obra «Epístola de Magnete». La obra detalla los imanes y su indestructibilidad. Además, la aguja oscilante en la brújula fue analizada en detalle. 

Los imanes han evolucionado constantemente desde su primer descubrimiento de milenio a milenio, incluidos los imanes muy fuertes. Se descubrieron imanes de ferrita (negro oscuro o antracita), imanes de neodimio (imanes muy fuertes), imanes de AlNiCo (de aluminio, níquel y cobalto) e imanes de cobalto de samario (aleación de cobalto y samario). Algunos de estos metales pertenecen al grupo de las tierras raras.

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