Las tareas de elevación de materiales requieren medidas preventivas. Por ello, hoy desde Bezabala os hablamos de cómo los factores de riesgo y la prevención está relacionada con el entorno de trabajo, las operaciones y los útiles.

Estabilidad

La estabilidad del equipo puede ser una causa determinante de la caída de cargas. Por ello, tanto el operador como la persona que realiza el amarre de la carga, deben conocer los requerimientos de estabilidad del equipo, las características del entorno donde se ubica y en caso de anomalías, comunicar las incidencias detectadas.

Para asegurar una estabilidad suficiente hay que tener en cuenta las siguientes medidas:

  • Considerar la nivelación del equipo si el terreno es irregular. Evite la proximidad de los apoyos a desniveles y zonas de canalizaciones donde la superficie está más debilitada. Asimismo, compruebe que la zona de apoyo del equipo no es un relleno o se encuentre próxima a una canalización.
  • El equipo deberá estar calzado y nivelado de forma que se asiente totalmente. Los estabilizadores se extenderán en toda su longitud. En caso de que el terreno no tenga suficiente resistencia, coloque calzos distribuidores de fuerza bajo los sistemas estabilizadores.
  • Recuerde no colocar los apoyos del equipo de elevación próximos a bordes o superficies que puedan dar lugar a una caída de la carga durante su manipulación, y tenga en cuenta el tipo de terreno y si existe riesgo de deslizamiento por agua, barro, etc.