La historia sobre la invención y evolución de la grúa es muy amplia. Por ello, estas semanas, desde Bezabala, te contaremos todo sobre este invento que revolucionó la historia.

Primera mención en un libro

La primera evidencia literaria que avala la existencia de la primera grúa compuesta de poleas aparece en los ejercicios mecánicos atribuidos a Aristóteles (384-322).

Grúas de la antigua Roma

La grúa, que fue inventada en la antigua Grecia, fue adoptada por los romanos para desarrollarla mejor, ya que el incremento del trabajo de construcción en edificios de dimensiones grandes lo requería. Es así como la grúa encontró su auge en la antigua Roma. 

En esta época se desarrollaron varios tipos de grúas:

  • El trispastos: Es la grúa romana más simple que hay. Consiste en una horca de una sola viga, un torno, una cuerda y un bloque que contenía tres poleas, con lo cual se tuvo una ventaja mecánica de 3 a 1. De esta forma, un hombre que podía realizar un esfuerzo de 50 kilogramos podía levantar 150 kilogramos (3 poleas × 50 kg = 150 kg).
  • El pentaspastos: Es una de los tipos de grúa más pesados que existe y funciona con 5 poleas. Esta grúa fue utilizada para el movimiento de bloques pesados para la construcción de grandes edificios.